Jorge: Me alegra mucho que pudiéramos juntarnos todos. He estado pensando sobre algunas cosas de las que necesito hablar con ustedes.

Linda: Bueno

Jorge: Mis doctores me pidieron que eligiera una persona decisora en caso de que no pudiera tomar decisiones médicas yo mismo. Ya saben, por mis problemas de corazón.

Rita: ¿Han empeorado las cosas?

Jorge: No, pero me parece que es muy importante hacer esto ahora que estoy suficientemente saludable para hablarles del tema.

Linda: Bien, dinos en qué estuviste pensando.

Jorge: Bueno, aunque siempre tomamos decisiones como familia, y quiero que trabajemos juntos como siempre, quiero que sepan que le pedí a Vera que sea la vocera de la familia, o sea la persona que habla con los doctores y toma las decisiones finales.

Jorge: Sé que es la más joven, pero ella me ha acompañado al doctor y conoce mis problemas médicos. Y he hablado con ella, sabe lo que quiero para mi atención médica.

Rita: ¿Cómo qué?

Jorge: Bueno, si los doctores lo recomiendan, está bien llevarme a la Unidad de Cuidados Intensivos y probar una máquina para respirar y otros tratamientos por un tiempo. Pero sé que mi corazón podría empeorar en cualquier momento. Por eso también le di permiso a Vera para trabajar con los doctores y tomar las decisiones médicas que considere mejores para mí.

Vera: De verdad haré todo lo posible para hacer lo correcto para el tío Jorge.

Jorge: Verdaderamente espero que puedan trabajar juntas y no discutir si no están todas de acuerdo con las decisiones médicas que Vera tiene que tomar por mí. ¿Están todas de acuerdo?

Linda: Creo que sí.

Vera: Tenía miedo de que todas se enojaran. Gracias, tío, por hablarnos de este tema. Estoy muy contenta que estemos teniendo esta conversación ahora.

Jorge: Yo también.